Cuando una famosa destilería publicita en una gran foto sus colmenas junto a una pequeña imagen de la botella de whisky, es que algo está cambiando.
Y gracias a su publicidad nos hemos enterado de la última moda entre los bebedores de whisky o whiskey, como lo llaman en Estados Unidos de América y en Irlanda, la llegada del whisky con sabor a miel.
Aprendiendo qué es el whisky
El whisky es un aguardiente obtenido por la destilación de un mosto de cereales, previa fermentación. Cebada, cebada malteada, centeno o maíz son los cereales más utilizados.
Cada fabricante introduce las notas de miel en su whisky de una manera diferente, a veces a través del licor de miel o añadiendo pequeñas cantidades de miel en forma de sirope.
Algunas marcas ya se atrevieron hace casi un siglo, pero en los últimos años su número ha ido en aumento.
El objetivo perseguido es que la bebida sepa al whisky de siempre (mucho whisky y un poco de miel), sin perder de vista un nuevo mercado interesado por estas notas dulces.
Las destilerías nos ofrecen muchos consejos para combinar esta bebida con miel.
Con zumo de naranja, o con cerveza de jengibre y zumo de lima, o con zumo de manzana…Las propuesta son muy variadas.
Un consejo, no os perdaís la publidad del lanzamiento del whisky con miel de Jack Tennessee. ¡Es muy buena!
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